Caminar es posiblemente el ejercicio más saludable que se puede practicar, ya que no requiere estar en una condición física envidiable y, por otro lado, las articulaciones de las piernas no sufren los continuos impactos que se producen cuando practicas running.
Además, para bajar esos kilos de más no es necesario que te mates a correr ¡Destierra de tu cabeza ese falso mito! Andar a diario durante aproximadamente 45 minutos o una hora es una manera eficaz de adelgazar y, al mismo tiempo, mantenerse en buena forma. Pero además, si quieres quemar unas calorías extras mientras caminas, solo necesitas poner en práctica esta media docena de trucos.
Mueve los brazos
¿Te gustaría consumir un 15% más de calorías al caminar? Presta atención a tus brazos. Tus extremidades superiores juegan un papel fundamental. El movimiento ideal es el que se ejecuta de delante hacia atrás, formando un ángulo aproximado de 90 grados y siempre en el sentido de la marcha. De esta forma, conseguirás mayores consumos de energía al andar.
Márcate objetivos y supérate
Si tienes un wearable como una pulsera de actividad o un smartwatch tienes el aliado perfecto para picarte cada vez que sales a caminar. Estos modernos dispositivos son capaces de guardar cada sesión de entrenamiento para ver tus progresos.
Podrás fijarte objetivos y conseguirás recompensas por alcanzarlos. Y si no tienes la suerte de contar con un gadget de este tipo, descárgate una app de running (Endomondo, Runtastic, Strava, Runkeeper, etc.) en tu móvil. También te valdrá para fijarte retos y superarte.
Ponte algo de lastre
Cuanto más peso lleves, más calorías consumirás cuando camines. Podrías imitar a Obélix y cargar con un menhir…pero desterrada esta idea, la otra opción que te proponemos es ponerte una mochila rellena con unas cuentas piedras y llevarla en la espalda durante el recorrido. Muchos alpinistas y corredores de trail utilizan este truco en sus entrenamientos para preparar ascensos a montañas de cierta altitud.
Cambios de velocidad
Variar el ritmo cuando caminas ayuda a quemar calorías extras. Una fórmula que no falla es andar a paso ligero un par de minutos y otros tres a una velocidad más moderada. Por otra parte, si en tu recorrido puedes incluir algunos tramos con cuestas o pequeñas pendientes e incluso algunas escaleras, quemarás más grasa, favorecerás tu sistema cardiovascular y tonificarás la musculatura de tu tren inferior.
Levanta un poco las rodillas
Otro truco para incrementar notablemente el número de calorías a la hora de caminar es dar algunos pequeños saltos cada cierto número de pasos. También es bastante efectivo levantar un poco las rodillas al andar e incluso ir a ratitos de puntillas.
Zancadas largas
Aunque no es necesario caminar rápido para quemar más calorías, si ayuda el dar zancadas de una mayor longitud. Para ello, procura evitar las calles concurridas de las ciudades donde hay numerosos peatones que te obligarán a frenar y opta por hacer recorridos menos transitados.