Los mudras tienen su origen en la tradición hindú y son gestos que se realizan con las manos y los dedos para calmar la mente, ayudar a la concentración y producir bienestar y felicidad. Son una parte muy importante en la práctica de yoga y meditación. En Hatha Yoga se contemplan 24 mudras, cada uno con un significado y una intención.
Los mudras se realizan uniendo diferentes dedos, ya que cada uno de ellos simboliza uno de los cinco elementos que forman el universo, y activan los chakras o puntos energéticos del cuerpo.
Durante la práctica de yoga ayudan a conseguir objetivos, generar cierto tipo de energía o trabajar la intención. En meditación se utilizan para ayudar a la mente a estar presente a través de esa conexión en el cuerpo, como la típica posición en la que se unen el dedo índice y pulgar y que todos asociamos con el OM.
Pero no es necesario que hagas yoga o medites para beneficiarte del poder de los mantras. Utilizarlos en tu día a día te ayudará estar conectado contigo, a sentirte más sereno, más concentrado y a combatir las situaciones de estrés. Además, son fáciles de hacer en cualquier sitio sin que nadie se de cuenta, incluso en el trabajo.
Pararte cada día cinco minutos para hacer un mudra y respirar de forma consciente puede cambiar por completo tu ánimo y tu energía, sobre todo si los practicas al levantarte. Para ello, lo ideal es sentarse con la espalda recta en el borde de una silla o un cojín, cerrar los ojos, adoptar el mudra que hayas escogido y poner tu atención en la respiración.
Aquí tienes tres mudras que te resultarán muy útiles en tu día a día.
Namasté mudra. También llamado Anjali Mudra o saludo, es uno de los más conocidos en todo el mundo. Significa reverencia, respecto y, cuando lo haces acompañado de la palabra namasté, tu naturaleza divina saluda y reconoce la naturaleza divina de los demás. Utilizarlo te ayudará a sentir respeto por ti y por los demás y te ayudará a concentrarte.
Chin Mudra. Es el que todos asociamos a la meditación y a los momentos zen. Es el mudra perfecto para hacer en los momentos de estrés, para ayudarte a meditar y calmar la mente. Lo ideal es hacerlo sentado, con las manos sobre las rodillas, con las palmas hacia arriba, uniendo los dedos índice y pulgar, y estirando los tres dedos restantes.
Usha Mudra. Ideal para hacer por la mañana, ya que produce paz, calma la mente y aporta serenidad. Además, significa amanecer. Y es un gesto más común de lo que piensas en la cultura occidental (típico de las personas mayores cuando están tranquilas). Para hacerlo, sólo tienes que cruzar los dedos y dejar las manos reposando en el regazo.