Hacerse un selfie mientras uno disfruta tomando una cerveza en una terracita los lunes al sol, visitando Machu Picchu o cuando sale a correr, mola. Es lo que tiene el postureo. Así que autofoto al canto y seguido a compartirlo en las redes sociales más populares como Instagram y Facebook con algún hashtag –a poder ser en inglés que queda más cool- para dar un poquito de envidia a los amigos y conocidos virtuales. Y es que aparentar ser un triunfador en esta vida, no tiene precio. La clave es saber venderse y vamos a ayudarte.
Tu misión como runner en esta vida es abrirle los ojos a los agnósticos de este deporte para que vean a través de tus selfies las bondades y maravillas que se ocultan detrás de cada sesión de entrenamiento o carrera popular en la que participas. Conseguir cientos de likes, decenas de comentarios y un puñado de nuevos followers en cada publicación no es tan difícil como parece. Muéstrales con tus autofotos cuánto disfrutas corriendo.
La mejor noticia es que para hacer buenos selfies y ligar más no necesitas pulirte el sueldo de un mes para comprar un smartphone de alta gama que incorpora una cámara con más prestaciones que una réflex. Unas nociones básicas sobre fotografía, algo de práctica y una pizca de imaginación son los tres pilares para mejorar tus #runningselfies.
1. Mejor de día y con luz natural
Aunque las cámaras de los móviles siguen evolucionando a pasos agigantados, flaquean cuando las condiciones lumínicas son pobres. La luz es la materia prima de la fotografía. Si quieres sacarte un estupendo selfie procura hacerlo de día, con luz natural y evitando que el sol quede a tu espalda, de lo contrario saldrá una bonita silueta. Ignora los espacios cubiertos con luz artificial y ¡olvídate del flash!...a no ser que sea imprescindible.
2. Mira por el espejo retrovisor
Nadie quiere ni pretende robarte el protagonismo de la instantánea, sin embargo es importante que cuides un poco los detalles. Procura elegir un atrezzo con un paisaje natural bonito tirando a espectacular, histórico (con algún monumento de fondo) o relevante como la salida / meta de una carrera con caché. Recuerda: ¡siempre hay que mirar atrás!
3. Cuidado con el movimiento
Correr, sostener el móvil con una mano y hacerse una autofoto de plano medio, todo al mismo tiempo, tiene bastantes papeletas para que tu selfie salga borroso o movido. Y eso es precisamente lo que NO queremos. Para lograr una fotografía lo más nítida posible, sujeta firmemente el móvil con tu mano, baja el ritmo -como si fueras al trote o caminando- encuadra y dispara unas cuantas fotos. No escatimes carrete. Seguro que alguna se salva ;)
4. Trípode callejero y temporizador
El mobiliario urbano es un ‘arma’ de gran utilidad para aquellas personas que disfrutan haciéndose selfies de cuerpo entero mientras corren. Un banco, una papelera o cualquier otro objeto urbanita que encuentres en tu recorrido se pueden convertir en un trípode para apoyar el móvil. A continuación, selecciona el temporizador de tu smartphone con el retardo que consideres oportuno y el modo ráfaga. Ya solo tienes que desfilar corriendo por delante del improvisado paparazzi.
5. Saca el artista que llevas dentro
La creatividad en la fotografía no tiene límites (las reglas están para romperse) y eso incluye los selfies. Prueba diferentes ángulos -como los contrapicados para ensalzar tu figura- y distintos encuadres o composiciones. Si estás con más gente puedes dar dos pasos al frente para salir destacado en primer plano; si te encuentras solo puedes probar a inmortalizarte saltando…lo que se te ocurra. Aunque el protagonista de la fotografía eres tú, no necesariamente tiene que salir tu cara. Tus nuevas zapatillas de running o el pulsómetro que llevas en la muñeca indicando una nueva marca personal también son excelentes alternativas para una autofoto.
6. Aprende de los mejores
Si quieres seguir aprendiendo y progresando, el mejor consejo es fijarte en las imágenes que publican otros runners y cuyos selfies se vuelven virales. Empieza a seguir las cuentas más destacadas o las que más te gustan y analiza el tipo de fotos que publican en las redes sociales. Ahí encontrarás una buena fuente de inspiración para tus próximos selfies.