Yo no quiero meteros presión, o quizá un poco sí, pero esos ‘kilitos’ que cogemos en estas fechas son bastante difíciles de quitar (cuando no imposible).
Así que os voy a presentar unas cuantas equivalencias para que sepáis a lo que os tendréis que enfrentar una vez pasen estas entrañables a la par que peligrosas fechas.
Empecemos por el marisco… ¡Ay el marisco! Está muy bueno, sí, pero tiene mucho peligro. Para los amantes de pelar gambas y de chupar las cabezas como si no hubiera un mañana os diré que 100 gramos de gambas, y eso es como media docena, equivale a dar un paseíto de media hora, a paso vivo, nada de ir mirando escaparates.
A los que os gusta disfrutar con un buen cordero debéis saber que ingerir 250 gramos de este manjar os aporta la nada desdeñable cantidad de 615 calorías, eso sin patatitas ni ‘ná’ de acompañamiento. Podréis neutralizar estas calorías con una hora de trote suave a un ritmo aproximado de 6’15” por kilómetro, eso si no se os indigesta la paletilla de marras.
Los dulces son muy traicioneros, un par de hermosos trozos de turrón junto con una porción algo rácana de roscón de reyes transportaran hasta vuestras queridas ‘lorzas’ un total de 810 calorías. Las cuales podréis bajar con un esfuerzo, sudor y unas ricas series de 1000 metros, aderezadas con sus 10 minutos de calentamiento suave y 5 minutitos de vuelta a la calma. 8 repeticiones a un ritmo de 4’30” y estaréis servidos.
Tenéis que andaros con mucho ojo con el alcohol. Muchos creéis que al ser líquido no engorda y eso es un gran error. Un par de copas de vino cenando, más una de cava para brindar por las fiestas rematando con un ‘gintonic’ os aportarán unas 900 calorías.
Esto se podría quemar haciendo un ‘10K’ en unos 40 minutos justos. Aunque me temo mucho que con la más que posible resaca no estéis como para exigir a vuestro cuerpo un esfuerzo de tal calibre.
Y ahora vayamos a lo gordo, y nunca mejor dicho, una cena completa de navidad. Con sus entrantes varios, marisco, carne, postres… todo ello regado con buenos caldos y rematando con un café y alguna que otra copa.
Sin exagerar mucho nos podríamos ir a una ingesta de unas 2700 o 3000 calorías, eso ni sois tan zampabollos como lo soy yo. Esto amigos y amigas runners equivale a correr un maratón en torno a las 4 horas. ¿Cómo se os queda el cuerpo?
Las comparativas en cuanto al número de calorías consumidas son aproximadas. Estas variarán dependiendo del peso y edad de la persona y también de la intensidad del ejercicio, así que no os toméis esto al pie de la letra. No en vano no pasé del primer fascículo del curso de CCC de Entrenador deportivo y nutrición.
Ahora ya tenéis la información en vuestras manos así que depende de vosotros el que estas navidades acabéis pasando a formar parte de las huestes del ‘Faletismo Running’ o mantengáis esa espigada a la par que envidiable figura que lucís corriendo por vuestras calles y ciudades. Eso sí, luego no digáis que no os he avisado.