¿Llevas toalla al gimnasio? ¿Lavas esa toalla todos los días después de hacer ejercicio? ¿Limpias las máquinas antes y después de usarlas? ¿Te llevas tu propia esterilla para estirar, hacer abdominales y demás actividades que la requieran? Si la respuesta es no, solo tienes que leer este artículo para que te entren ganas de llevarla y así saber por qué es obligatorio en muchos gimnasios el uso de toalla.
Cuando vayas al gimnasio, párate un momento y mira a tu alrededor. Verás a gente corriendo en las máquinas o haciendo spinning sudando la gota gorda, otros haciendo pesas con la camiseta con chorretones de sudor y otros que están igual que al entrar al gimnasio, no se les mueve ni un pelo. También verás los cristales empañados, sentirás la humedad en el ambiente y olerás ese olor que tampoco hace falta describir.
La gente, el sudor, la humedad y los aparatos del gimnasio se convierten en un caldo de cultivo de gérmenes que se pasan de unos a otros en un pestañeo. Ese es el motivo por el que el instructor del gimnasio te persigue para que uses una toalla o ves decenas de carteles pegados por todo el gimnasio recordándote que la lleves. Lo hacen por tu bien y por el de los demás. Los objetivos que tiene que uses toalla son los siguientes:
Secarte el sudor: una toalla nos servirá para eliminar nuestro sudor y evitar secarnos con las manos o la camiseta, además de evitar que se nos resbalen los objetos que cojamos o nosotros mismos.
Algunos diréis, “yo no sudo tanto como para resbalarme o necesitar toalla”. Tú no sudarás, pero un porcentaje muy alto del resto de tus compañeros del gimnasio sí, lo que nos lleva al siguiente punto.
Evitar el contacto con las máquinas:hay gente que no suda, otros que sudan un poco y otros que sudan tanto que dejan incluso la marca de sudor en las máquinas. Sudar no es malo, es algo natural de nuestro organismo cuando hacemos deporte para eliminar toxinas y regular la temperatura corporal, pero tenemos que tener en cuenta que por un lugar por donde pasa tanta gente la higiene es fundamental.
Lo ideal es que todo el mundo debería secar su máquina u objeto después de utilizarlo, algo que no hace prácticamente nadie. Con la toalla evitaremos el contacto directo con esa máquina o esterilla, por ejemplo, evitando así el siguiente punto.
Evitar enfermedades: el sudor, más el sudor de las decenas o cientos de personas que han pasado por esas mismas máquinas, más el calor y la humedad que producimos, hace que nos convirtamos en una atracción para los gérmenes que frecuentan en el gimnasio.
Por eso, el uso de toalla evita el contacto directo con estos gérmenes evitando así la contracción de algunas afecciones cutáneas como por ejemplo los hongos, herpes, etc.
Consejos prácticos para cuando vas al gimnasio, apunta:
1.- Seca la máquina que vayas a utilizar antes y después de usarla.
2.- Llévate tu propia toalla para evitar el contacto con las máquinas.
3.- Utiliza tu propia esterilla.
4.- Si tienes alguna herida, cúbrela para evitar infecciones.
5.- Evita tocarte los ojos, oídos, boca y la cara en general cuando estés haciendo ejercicio. Si lo haces, sécate las manos con la toalla o lávate antes de hacerlo.
6.- Lava la toalla todos los días.
7.- Utiliza toallas de microfibra, son más absorbentes y secan rápido.