Esto es lo que ha propuesto el ministerio irlandés de Sanidad, de la mano de su ministro Leo Varadkar, con el fin de mejorar la salud de los irlandeses. La medida está enmarcada en el Plan Nacional de Actividad Física que, a diferencia de otros países europeos como España, está aprobado y en funcionamiento.
La propuesta hace un llamamiento a los empresarios del país para que modifiquen los puestos de trabajo de sus empleados y les permitan trabajar de pie. Esto conllevaría, por ejemplo, el cambio de la mayoría del mobiliario de las oficinas, diseñado durante décadas para trabajar sentado, lo que, a priori, parece un hándicap económico importante de cara a los empresarios.
Según los datos que manejan desde el ministerio de Sanidad irlandés, la mayoría de los ciudadanos hace “poco o nada de ejercicio”, y el que hacen antes o después de las horas de oficina no provoca efectos positivos en el organismo lo suficientemente importantes como para revertir la falta de actividad física durante las horas de la jornada laboral.
Sin embargo este Plan Nacional de Actividad Física también conllevará otras medidas, no solo las del ámbito laboral. Así por ejemplo se han formado por el país más de 500 grupos de personas para organizar caminatas, y los médicos están recibiendo formación específica para “recetar” a sus pacientes el ejercicio más adecuado con sus dolencias.
Del mismo modo, también van a ir dirigidos a los colegios, ya que, según calculan, el 20% de los alumnos no hacen el suficiente ejercicio, y el 25% padece problemas de obesidad.
Además, también van a invertir en realizar más rutas pedestres y ciclistas, de modo que los irlandeses no puedan tener excusa para no hacer deporte, incluso en el trabajo ¿te lo imaginas?