No hay una explicación científica que avale el por qué las personas que están haciendo deporte se ven obligadas, de algún modo, a expulsar sus esputos hacia el exterior, regalándonos imágenes de lo más desagradables, pero lo cierto es que es una práctica bien extendida entre deportistas de todo tipo.
Los motivos más comunes que explican los corredores para lanzar esas masas de saliva o de mocos con sustancia al suelo son las siguientes:
1.- Exceso de saliva por la temperatura: hay determinados factores que inducen al cuerpo a provocar más saliva de la normal. Si corres en un clima seco, lo más probable es que tengas la boca seca cuando corres, pero si lo haces en un clima húmedo, templado, o en días de frío, la producción de saliva se puede disparar cuando pones a tu cuerpo a trabajar duro para realizar carrera continua.
Todo esto se produce por la propia función de la mucosidad dentro del cuerpo humano: por ejemplo, para evitar que el aire que inspiras llegue frío a los pulmones, al pasar por la nariz las mucosas se activan y ejercen de “radiadores” para calentar ese aire antes de que llegue al interior de tu cuerpo. Al producirse este proceso, la producción de mucosidad se dispara, y de ahí el exceso de mocos.
2.- Por haber sido fumador: otra de las causas más comunes por las que los corredores o deportistas escupen o tienen que expulsar sus mocos por la nariz de manera tan frecuente es porque anteriormente han sido fumadores. Al practicar deporte, sus pulmones reaccionan de una manera distinta, provocando un exceso de mucosidad que no tiene por qué ser malo, sino un síntoma de que están recuperándolos después de un tiempo intoxicándolos con nicotina.
3.- Por alguna alergia: sobre todo en primavera se puede dar el caso de que los mismos mocos que te atrapan debido al polen sean los mismos que después tengas que esputar cuando estás haciendo deporte. Si es algo demasiado excesivo, prueba con un mucolítico antes de empezar a hacer deporte y así podrás reducir la producción mucosa.
4.- Por la ingesta de medicamentos: algunos medicamentos pueden tener como efecto secundario un aumento de salivación, y eso lo notarás a la hora de hacer deporte en un aumento de los mocos que tienes que expulsar.
En cualquier caso, si lo tienes que hacer, hazlo, no queda otra pero, como consejo que te damos, por favor, no lo hagas en lugares que puedan ser pisados / tocados después por el resto de humanos que habitan por tu zona. Te lo agradecerán.