Por esa razón, la prevención debería ser un punto fuerte esencial, y no sólo con el control autoexploratorio que deben hacerse las mujeres periódicamente, sino también teniendo en cuenta la dieta.
Recientemente se ha demostrado que algunas frutas, verduras, y cereales integrales contienen antioxidantes, anti-estrógenos, y otras propiedades quimioreceptivas que pueden evitar que en algún momento de la vida padezcas de cáncer de mama.
Calabaza
Como en las zanahorias, la sustancia que otorga a este vegetal el color naranja, amarillo o rojizo, se llama beta-caroteno, y tiene la capacidad de disminuir el riesgo de desarrollar tumores y quistes.
Si no te gusta la calabaza, puedes optar por el aceite de oliva con comino o pimienta negra, o cualquier verdura de ese color (pimientos, tomates, etc).
Té de salvia
El té contiene teína (que es parecido a la cafeína) y te ayuda a aumentar el metabolismo, además es una bebida diurética haciendo que no retengas líquidos, y también tiene un gran poder antioxidante.
Pero lo importante (y curioso también) es que contribuye a disminuir la sudoración excesiva. Este exceso de líquido puede obstruir algún poco del seno provocando espinillas además de lo incómoda que es la sensación de no parar de sudar en todo el día.
Germen de trigo
El germen de trigo se viene usando desde hace tiempo como medicina natural para algunos síntomas del síndrome premenstrual como puede ser la hipersensibilidad en los senos.
Se ha descubierto que si se consumen aproximadamente 400 gramos de este alimento, la mujer puede reducir hasta un 60% los típicos malestares como la fatiga, o la hinchazón de la mama.
Este producto no es nada difícil de encontrar como suplemento alimenticio. Aunque si vas a tomarlo ya sabes, antes coméntalo con tu doctor.
Soja
Unos estudios llevados a cabo en la Clínica Cleveland, confirmaron que las mujeres que consumen regularmente daidzeína y genisteína, tienen menos probabilidad de sufrir senos fibroquísticos.
Vale, no te asustes, puedes conseguir estas sustancias en la soja o en el tofu. Pero como siempre digo, todo con moderación. Recuerda que la soja en su versión salsa, contiene mucha (demasiada) azúcar, y que puede acabar perjudicándote.
Es una lástima que cada vez haya menos adolescentes conscientes de la alta incidencia de cáncer de mama que hay hoy en día, y su única preocupación sea ahorrar unos euros para poder operarse el pecho y tenerlo como en las películas (ojo, que no digo que esté mal).
Pero creo que si además de tener un pecho (bueno, los dos) como a una le gusta, también están sanos, se habría ganado una batalla doble.