Según los expertos, cuando se pierde peso con una dieta es gracias a que realizamos un esfuerzo, pero no se va más allá. No se analizan las causas, el origen de por qué se ingería tanto alimento y eso, al final, lo único que provoca son los efectos rebote y la vuelta a las andadas.
Ahora mira fijamente a este péndulo. Muy bien. Cuando leas “ahora”, duérmete”. Ahora. Perfecto. A partir de ahora te tendrás que creer todo lo que leas. Y es que vamos a hablar, como habrás podido entender ya, de hipnosis aplicada a la pérdida de peso ¿es realmente eficaz?
La técnica más común que han utilizado los profesionales de la hipnosis es la llamada “banda gástrica virtual”, que tiene su origen en la operación quirúrgica que realizan los cirujanos a personas con obesidad mediante la implantación de una banda que reduce el estómago.
Mediante esta técnica, los hipnólogos especializados en nutrición, te hacen creer a través del control del subconsciente que tú también tienes “instalada” una banda de ese tipo, consiguiendo que tu cerebro no tenga tanta necesidad de ingerir alimentos al pensar que tu estómago se ha reducido de tamaño.
De este modo, donde antes creías que podías meter una hamburguesa con doble de carne y patatas fritas, ahora creerás que solo te cabe una ensalada mixta. Y así sucesivamente irás cambiando tus hábitos de alimentación y, si has dado con un buen hipnólogo, también tus hábitos de vida para salir a hacer deporte.
¿Pero, es realmente efectiva?
En primer lugar, debes preparar tu chequera, ya que la “implantación” mental de esta banda gástrica virtual te hará acudir al profesional durante varias sesiones, y no son del todo baratas. El Colegio de Hipnólogos de España marca un mínimo de 25€ por sesión y un máximo de 60€, con una duración estimada de entre 40 y 80 minutos. Haz cuentas.
Por otro lado, como muchas de las dietas que habrás comenzado a hacer y que no has acabado, la hipnosis tampoco es tan beneficiosa como lo puede ser la práctica de deporte de manera regular, el único método fiable al máximo.
Teniendo en cuenta que se trabaja con un elemento tan impredecible y complejo como la mente humana, no es una técnica con un porcentaje de éxito del 100%, aunque los profesionales que se dedican a ello afirman que, en los casos en los que se sigue el tratamiento hasta el final, el éxito está casi asegurado.
Ahora. Clic.