Cada uno tiene su propia manera de lidiar con el estrés: a algunos se les cierra el estómago, a otros les da por morderse las uñas y otros muchos lo combaten comiendo lo primero que encuentren a su paso, pero qué casualidad, casi siempre suelen ser unas patatas fritas, bollería industrial, galletas saladas...
Pese a que son muchos los que combaten los momentos de tensión de esta manera, tal y como se explica en el DailyMail ese mecanismo desde luego, dista mucho de ser el más saludable. Por ello, los nutricionistas recomiendan cambiar ese hábito de correr a la nevera por otros más sanos ya que de lo contrario, esas manías pueden acabar convirtiéndose en desórdenes alimenticios que puedan conducir a problemas serios de salud.
A continuación te ofrecemos algunas de los trucos que ofrecen los expertos para acabar con el picoteo:
Date un paseo
Para la nutricionista Lyndi Cohen, responsable de Nude Nutricionist, una de las maneras más simples de acabar con el estrés y las ganas de comer que éste genera en muchos es salir a caminar. "Dar un paseo puede ser el mejor modo de distraer al cerebro de los antojos y ayudarle a obtener las endorfinas que necesita en algún lugar que no sea el chocolate", asegura. "Con un paseo de 10 minutos puede bastar ya que se ha demostrado que es suficiente para amortiguar el estrés que se pueda generar y de este modo se deja un periodo de tiempo para que el anhelo desaparezca y los niveles de estrés se reduzcan”.
Aléjate del móvil
Por su parte, desde la consulta de Dietitian Cassie subrayan que pese a que los teléfonos parecen ser una forma de distracción, en última instancia, pueden suponer una fuente de estrés ya que la recepción de correos electrónicos o textos no deseados pueden conseguir efectos no deseados.
"Además, utilizar el móvil mientras se está comiendo provoca que desviemos la atención hacia otros aspectos, por lo que es probable que consumamos calorías en exceso".
Crea un lista de canciones
La música puede ser un relajante natural, precisamente por ello, Cohen asegura que crear una lista de reproducción que nos guste puede ayudarnos a conseguir acabar con el estrés. De este modo, nuestra mente se distraerá de los “antojos” azucarados. "Trata de escuchar música que te sitúe en un buen estado de ánimo o música nueva que te atraiga y te distraiga”, comenta. "Otra opción puede ser escuchar un podcast o un libro, ya que estos también pueden alejar tu mente de los antojos”.
En este sentido, la música clásica parece ser la más adecuada como método de relajación ya que según un estudio que elaboraron investigadores alemanes el pasado junio, la música de Mozart y Strauss redujo significativamente el estrés, la presión arterial y la frecuencia cardíaca entre los participantes en la investigación.
Duerme bien
Una buena noche de sueño puede contrarrestar los efectos negativos del estrés. Así, los estudios desarrollados en este ámbito demuestran como estar bien descansado ayuda a las personas a lidiar con problemas inesperados en el trabajo y de este modo será menos probable que recurran desesperados a buscar consuelo en la “comida chatarra”.