La esterilla o mat es el accesorio de yoga en el más tienes que invertir, ya que será lo que siempre utilices en tu práctica. Será tu espacio personal, en el que ejercitarte, descansar o meditar, y debes sentirte completamente a gusto sobre él.
Tener una buena esterilla de yoga es la diferencia entre una práctica cómoda, segura y agradable, y una incómoda y lesiva. Aunque puedas usar las de tu centro de yoga si es que vas a uno, te recomendamos tener la tuya propia por comodidad e higiene y para poder practicar cuándo y dónde quieras.
Criterios para escoger tu esterilla
Al comprar una esterilla de yoga debes tener en cuenta estos puntos:
Tamaño. El tamaño estándar de una esterilla de yoga es de 60 cm de ancho por 1,73 cm de largo. Este tamaño es suficiente para cualquier práctica y te permitirá estar de pie, sentado o tumbado con comodidad.
Grosor. Los mat de yoga suelen ser de 2, 4 o 6 mm. Este es uno de los aspectos más importantes porque de él dependerá tu comodidad. Es importante que no sientas el frío o la dureza del suelo y que tus manos, rodillas o pies tengan una superficie amable donde apoyar. Pero también es uno de los aspectos más personales, ya que cada persona necesita una esterilla diferente, más o menos fina (en prácticas avanzadas se suelen tolerar mejor las esterillas finas). Cuanto más gruesa sea la esterilla más cómoda será pero también más inestable a la hora de hacer equilibrios.
Peso. En función de material con el que esté hecha tu esterilla, será más o menos pesada, un aspecto que tienes que valorar pensando para qué la vas a utilizar: en casa, para llevar a tu centro, para viajar… Existen esterillas plegables especialmente pensadas para yoguis viajeros, pero te recomendamos que sean solamente la opción de viaje, ya que suelen ser demasiado finas y con menor tracción.
Tracción. Es la capacidad de agarre de la esterilla. Este es uno de los aspectos más importantes, ya que debes buscar siempre una esterilla que no resbale. De lo contrario no sólo no estarás cómodo durante la práctica sino que puedes lesionarte. No hay nada más incómodo que resbalarse durante una clase de yoga así que lo ideal es probar la esterilla antes de comprarla. La tracción está directamente relacionada con la textura: satinada, rugosa, con relieve… no busques la más bonita sino la que mejor adherencia te aporte.
Material. Si es posible, que tu esterilla esté realizada con materiales ecológicos, respetuosos con tu cuerpo y con el medio ambiente. Ten en cuenta que sobre la esterilla vas a pisar descalzo, apoyar las manos, tumbarte…
Transportabilidad. Es una aspecto a tener en cuenta. Algunas esterillas llevan gomas de sujeción una vez en enrolladas, cintas para enrollarlas y transportarlas, fundas… Busca un sistema de transporte cómodo para ti.
Precio. Puedes encontrar esterillas por menos de 20 euros, pero no te recomendamos comprarlas ya que será muy difícil que cumplan las premisas anteriores. El precio medio de una buena esterilla está entre los 40 y 80 €. Y es la mejor inversión que harás en tu práctica.
Nunca. Jamás practiques yoga en una colchoneta de fitness: no tienen ni el tamaño ni el grosor ni la sujeción adecuadas. Pregunta siempre por esterillas específicas para la práctica del yoga. Puedes comprarlas en grandes tiendas deportivas, específicas de yoga (en internet encontrarás muchas) o en centros de yoga.