Con estos calores y con los que están por venir, a muchos nos cuesta la vida salir a correr. Además, las vacaciones hacen que nuestro cuerpo pida una tregua y que nos dejemos llevar por la pereza, la gula y algún que otro pecado capital más. Si es tu caso, no dejes de leer este artículo, encontrarás opciones para no acabar el verano y las vacaciones como un Falete cualquiera.
Que no te apetezca correr no quiere decir que tengas que pasar el verano sin mover un solo músculo. Echa un ojo a estas alternativas, seguro que alguna te convence y te animará a pasar un verano más saludable.
Bicicleta
Seguro que la tienes olvidada en un rincón de casa o puede que encuentres una en el lugar de veraneo al que vayas. Y si, hace años que no montas, pero es algo que no se olvida y en el peor de los casos puedes ponerte otra vez los ruedines. Eso sí, ten mucho cuidado por donde vas con ella, respeta a los peatones y mucho ojo con los coches. Sentir el aire en la cara mientras pedaleas y disfrutar de nuevos caminos y paisajes es un planazo veraniego.
Natación
No hace falta que seas Michael Phelps para hacerte unos largos en la piscina. Tampoco importa que tu estilo esté mucho más cerca del de un perrillo de aguas que el de un nadador profesional. El caso es que puedes utilizar la piscina para algo más que tirarte 'a bomba' para salpicar a tus amigos y pareja.
Aquagym
Yo lo descubrí en un hotel estando de vacaciones. El primer día les miraba diciendo: "¿Qué hace esa gente en la piscina haciendo el ganso?". Pero el segundo día me pudo la curiosidad y me metí en el agua. El calentón que te llevas es muy majo, pero con una gran ventaja, estás fresquito por el agua de la piscina. Si tenéis oportunidad, no dejéis de probarlo.
Raquetas
Ya sean de tenis o unas palas de pádel o incluso unas de playa. El caso es mover el esqueleto y las 'pseudolorzas' que empiezan a florecer por los caprichos veraniegos. El ir detrás de una pelota y golpearla con más o menos 'flow' hará que esas cervezas, helados y comidas copiosas de más, no se establezcan de manera definitiva en tu cuerpo serrano.
Andar
Caminar a paso vivo es uno de los deportes más saludables que existen y en vacaciones se dan todos los factores favorables para que lo practiques. Puedes recorrer la playa de un lado a otro, o descubrir caminos ignotos en el pueblo de tus abuelos o quizá subir a la montaña para disfrutar de maravillosos paisajes. Andar puede ser una magnífica alternativa y un estupendo entretenimiento. Eso sí, con un calzado adecuado. Ojo con las chanclas que son responsables de más de una fascitis plantar.
Pachangas
¡Ay esas pachangas veraniegas! Reuniones de viejos amigos con un balón por medio. Que buenos ratos y que agujetas dejan. No desaproveches la ocasión de jugar un partidillo de fútbol o baloncesto. Pero ten cuidado con la intensidad que le pones, las lesiones son muy comunes en este tipo de encuentros de 'solteros contra casados'.
Como veis, alternativas hay muchas. No puede ser que pase el verano y que dejemos nuestros cuerpos en barbecho. Eso sí, hay que tener mucho ojo con las horas que elegimos para hacer deporte. Hay que intentar evitar las horas centrales del día, protegernos del sol e intentar estar bien hidratados. Y sobre todo y lo más importante: ¡¡DISFRUTEMOS!!