A simple vista esta cancha de fútbol de la favela Morro da Mineira en Brasil puede parecer un campo como cualquier otro, pero la diferencia de éste es que bajo ese cesped artificial se encuentran 200 placas cinéticas encargadas de captar la energía que generan los jugadores con su movimiento en el terreno de juego. ¿El objetivo? Poder obtener la energía necesaria para encender los focos del campo durante la noche.
Las placas, que están fabricadas en un 80% con materiales reciclados, han sido desarrolladas por la empresa inglesa Pavegen Systems, creada en 2009 por un joven ingeniero londinense llamado Laurence Kemball-Cook. Éstas han sido en diez filas, cinco en cada mitad del campo para alimentar así seis reflectores tipo led de 280 vatios dispuestos a ambos lados de la cancha.
De este modo, durante la noche, la luz que ilumina el terreno de juego es generada en su totalidad por la energía cinética de los jugadores. Durante el día, entre el 75% y el 80% de la electricidad procede de un panel solar instalado encima de una escuela de samba ubicada al lado del campo.
Es la primera vez que este tipo de tecnología se utiliza en un terreno de juego, sin embargo la empresa ya ha llevado a cabo numerosos proyectos en Reino Unido y Europa, con su incoporación, por ejemplo, en escuelas, festivales o centros comerciales.
En este caso, el objetivo de este proyecto es poder extender a más zonas de este barrio, castigado por la pobreza, este sistema, para poder ofrecer energía a otras instalaciones.
Durante la inauguración del este campo en diciembre del pasado año estuvo presente el astro del fútbol Pelé, que se emocionó durante el acto al recordar que su padre le puso el nombre de Edson en homenaje al inventor estadounidense Thomas Alva Edison y aseguró que se sentía "honrado de volver a trabajar para su país".
Quién sabe, tal vez esta sobre esas placas esté jugando ya el próximo rey del fútbol...