Recurrir sólo al cardio para quemar calorías es un error que muchas cometen. El entrenamiento de fuerza se ha revelado clave para conseguir una pérdida de peso efectiva y duradera. De hecho, es básico para evitar el temido efecto rebote si estás a dieta.
Aquí tienes las razones por las que el entrenamiento de fuerza no falta en la rutina de ejercicio de ninguna celebritie. Además, te desmontamos algunos falsos mitos con un experto.
Músculos y metabolismo
Como señala César Bustos, de Centro Pronaf, especializado en Programas de Nutrición y Actividad Física, el entrenamiento de fuerza ayuda a bajar de peso y aumenta el ritmo metabólico basal. Para Domingo Sánchez, autor de 'Mujer en forma: el reto', el trabajo de fuerza es especialmente importante en las mujeres, ya que no sólo es básico en el mantenimiento del peso si no en su salud.
Trabajar tus músculos con máquinas, pesas, body pump, entrenamiento funcional o cualquier otro tipo, te ayudará a conseguir el cuerpo atlético que ves en muchas famosas. Tus músculos también te reconciliarán con los hidratos de carbono, su gran combustible.
Más peso, más beneficios
Como dice Sánchez, a algunas mujeres les asusta la sala de pesas porque creen que aumentarán volumen; otras levantan tan poco peso que nunca conseguirán grandes mejoras físicas. 'No desarrollarás jamás los músculos de un culturista, lo que conseguirás es un cuerpo fuerte y definido', dice.
Trabajar tu masa muscular no sólo mejorará tu aspecto físico, también le proporcionará muchos beneficios a tu salud. Te ayudará a mejorar la densidad ósea, la movilidad articular y la composición corporal. Además, el aumento de la fuerza te supondrá un gran cambio en las tareas de tu día a día. Tener unos músculos tonificados también te ayudará a prevenir y mejorar problemas metabólicos y enfermedades como la diabetes.
El entrenamiento de fuerza también mejora la postura y el tono muscular, evitando desequilibrios musculares y cambiando la apariencia física. Cuidar tus músculos también te ayudará a envejecer mejor, ya que tu metabolismo podrá mantener a raya a las grasas.
Falsos mitos
Domingo Sánchez nos ayuda a desmontar algunos mitos en torno al entrenamiento de la fuerza:
1.- Aumentaré de volumen. Los niveles de testosterona de las mujeres son de 15 a 20 veces más bajos que los de los hombres, lo que hace imposible que puedan conseguir grandes músculos. Además, la masa muscular de las mujeres permite muy pocas modificaciones.
2.- Si lo dejo engordaré. Ni siquiera dejando drásticamente el entrenamiento tus músculos se convertirán en grasa. Si engordas es porque sigues comiendo igual, pero el gasto calórico es menor.
3.- Lo que quema es el cardio. La combinación probada de ejercicio que más ayuda en la pérdida de peso es un programa de entrenamiento cardiovascular y de fuerza. Y cuando el sobrepeso es importante, el entrenamiento de fuerza es mucho más recomendable.
4.- Aumentaré de peso. Al iniciar un programa de fuerza el peso corporal se eleva, pero no por el aumento de la masa muscular sino por las adaptaciones fisiológicas del organismo. La causa es el glucógeno muscular que se almacena en los músculos por la mayor demanda energética. Puede que aumentes algo de peso pero bajarás de talla.