"Los glúteos son tres músculos diferentes: glúteo mayor, medio y menor. El músculo que todos conocemos como glúteo es en realidad el glúteo mayor que es el encargado de la extensión de la cadera y de la rotación externa de la pierna, por ejemplo, cuando subimos una escalera o empujamos un obstáculo estamos utilizando este músculo”, afirma desde el servicio de Medicina Deportiva, Rehabilitación y Fisioterapia de Hospital Universitario Quirón Madrid.
El glúteo propiamente "no se cae", sólo disminuye su volumen -y por tanto su capacidad de contracción- debido a factores como la edad o la falta de actividad física. Las razones: los años y el sedentarismo, que no ayudan. De la misma forma, los expertos aseguran que el tamaño no influye en esa flacidez de la que nos quejamos. No, aquí el tamaño no importa.
"El tamaño del glúteo está determinado genéticamente según nuestro tamaño corporal. Tener un músculo de mayor o menor tamaño no es un factor determinante para su pérdida de función. El factor fundamental es la actividad a la que esté sometido este músculo. Cuanto mayor sea la actividad a la que esté sometido, menor será la pérdida de función y, por tanto, su tamaño y fuerza", explican, el posible peso de un exceso de grasa no es una excusa.
En el caso de las mujeres, que genéticamente acumulan más grasa en las caderas y en los muslos, la percepción de una posible flacidez puede ser más evidente; sin embargo, poco tiene que ver con tener un glúteo más o menos fuerte ya que "la capa grasa está situada por encima de la zona muscular", aseguran los especialistas del Hospital Universitario Quirón Madrid.
Y si con nuestra genética poco podemos hacer y con el tiempo que pasa tampoco, solo nos queda hacer del deporte nuestro mejor aliado. Está en el hit de los objetivos de cualquier deportista: endurecer, redondear y elevar glúteos.
"Con la edad o la falta de actividad, el glúteo pierde fuerza y volumen. Esta pérdida de volumen no se debe a un descenso del número de fibras que lo conforman, sino a una disminución de su tamaño", explican los especialistas, qué hacen hincapié en que el ejercicio físico es determinante para luchar en contra de la disminución del tamaño de la fibra muscular y realiza un efecto parecido al rejuvenecimiento muscular.
Glúteos jóvenes y firmes.
Para conseguirlos solo hay que trabajar la zona deseada con ejercicios de fortalecimiento específicos:
-Ejercicios como la ascensión de gradas (siempre teniendo cuidado con las rodillas). Este ejercicio fuerza la extensión de la cadera, fortaleciendo el glúteo.
-Ejercicios en posición de cuadrupedia (a cuatro patas) levantando la pierna hacia atrás (tanto con la rodilla doblada como con la rodilla estirada).
-Las clásicas sentadillas (flexionar las rodillas con la flexión del fémur hacia atrás y la espalda recta) cargando con el peso del cuerpo.
Tener unos glúteos de portada es cuestión de sudar sin perder de vista el objetivo. Grandes o pequeños hay que tenerlos siempre fuertes y duros, la única forma de que defiendan unas buenas mallas.