Para algunos, el Kamasutra es el típico libro que, en algún momento de tu vida, tus amigos o amigas te han regalado en plan de broma y, ahora, coge polvo en una estantería de la habitación o en una caja del trastero.
No obstante, dentro se encuentra la solución a uno de los problemas con los que te enfrentas todos los días: el ¿y ahora, cómo quemo estas calorías que me acabo de meter al cuerpo con esta hamburguesa?
Aunque, para algunas de las posturas que vamos a diseccionar ahora se requiera un mínimo de forma física (por el bien de tu pareja a la hora de cogerle en volandas), con un poco de práctica no tendrás ningún problema en realizarlas. Vamos allá:
1.- El amazonas: además de ser el río más largo de la Tierra, es una posición del kamasutra. "Si se hace de cuclillas, ella ejercitará tanto abdominales como las piernas, mientras que si probáis a hacerlo de pie con ella enredada en su cintura él hará mucha más fuerza en sus brazos", explica Silvia Carpallo, autora de 'El orgasmo de mi vida'.
2.- La carretilla: ¿Qué mejor que hacer flexiones que hacerlas contra el suelo en esta posición? En este caso, la mujer tendrá que soportar todo su peso solo con las manos, mientras que el hombre le sujeta por los pies en volandas. "Suele gustar mucho por la profundidad, pero es necesario un fondo físico, aunque desde luego ayuda a fortalecer gran parte de nuestra musculatura", comenta Carpallo.
Además, el chico deberá flexionar un poco las piernas si quiere que todo vaya bien, por lo que, además de trabajar los brazos también fortalecerá todo el tren inferior.
3.- El abrazo: y no del oso precisamente. En esta postura, tanto ella como él deberán hacer gala de su resistencia física si no quieren acabar de un trastazo en el suelo. La chica se debe colgar con las piernas en la cintura del chico, quien la sujetará por los muslos o por la espalda. En este caso también se lleva a cabo un trabajo importante de cuádriceps y bíceps por parte del chico, al tener que sujetar bien a su pareja. Consejo: apoyarse contra una pared para mitigar un poco la fuerza.
4.- A galope: el nombre de esta postura lo dice todo. El chico, tumbado en la cama boca arriba verá como su pareja hace el resto, que no es poco. Ella podrá trabajar los cuádriceps haciendo sentadillas sobre su pareja, o bien toda la zona del core abdomen si su deseo es iniciar un movimiento de hacia delante o hacia detrás. Ventaja: mientras se produce el movimiento, el chico puede estimular el clítoris con la mano. Qué haga algo ¿no?
5.- La tarántula: por mucho miedo que pueda dar este nombre, no debes preocuparte. Aquí trabajaréis, sobre todo, los brazos. Él debe apoyarse sobre las manos con las piernas estiradas. Ella, a horcajadas apoyada también con las manos y las piernas. Esta postura es muy buena para fortalecer todo la zona los cuádriceps femeninos y también los brazos. "Es una postura no muy difícil de hacer pero que permite variar un poco las rutinas, lo cual siempre resulta estimulante en la vida en pareja", explica Silvia Carpallo.
Como veis, hay vida más allá del misionero (aunque no hay por qué despreciarlo tampoco) y todo un mundo de posibilidades que están muy cerca de ti: en ese libro que tienes guardado. Ponte en forma.